“Juli, cuna de la diablada”
Los jesuitas fundaron los autos sacramentales más antiguos en Chucuito. Muestra de ello, los rastros del catolicismo están en la ciudad de Juli y pueblos aledaños, éstas poseen la mayor cantidad de templos en el continente; por ello se le denomina "La Pequeña Roma de América". De allí se expandió las ramificaciones misioneras hacia: Bolivia, Paraguay, Argentina y Chile; esto en el siglo XVI".
El profesor Lauro Rodríguez
Terceros, director del Ballet Chela Urquidi de Bolivia -el más grande e
importante después del Ballet Nacional de Danzas de Bolivia-, ha escrito un
sabroso artículo que narra: "... la ciudad de Puno pertenecía al obispado
de La Paz, sociológicamente la ciudad de Puno es uno de los crisoles más
grandes de América, en las culturas prehispánicas, quechuas, aymaras, urus,
lupacas, chiriguanos, etc.

La ciudad de Juli es famosa por
sus templos, la llaman también la Roma Aymará y es precisamente en esa ciudad
donde la iglesia hace la representación de los siete pecados capitales para cristianizar
a los lupacas".

Desde el punto de vista
antropológico cultural, podemos señalar que el diablo es una deidad de la
religión católica impuesta en las culturas aymaras y quechuas -no asimilada-,
que el destacado director artístico y coreógrafo boliviano, también rescata, y
que el ministro de Cultura de ese país, Pablo Groux, ignora. "estos dos
países tienen las mismas costumbres, mitos, supersticiones, etc., solo con
algunas peculiaridades que las diferencian pero no en la esencia, por estas y
otras cosas es que los dos pueblos se llaman hermanos". No más palabras.
buena información!
ResponderEliminarBuen artículo para saber un poco mas de esta hermosa cultura
ResponderEliminarinteresante , buena informacion
ResponderEliminarinteresante , buena informacion
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